La situación está fuera de control. Hemos reiterado en varias ocasiones al Gobierno que la región de Los Ríos debe sumarse al Estado de Excepción Acotado que ya rige en la Araucanía y pese a los llamados tanto de las víctimas, como de la sociedad civil no hay respuesta y una vez más debemos ver con estupor como se produce un nuevo ataque incendiario en la región.
Nuestros agricultores ya no pueden esperar a que el Gobierno desde sus cómodas oficinas en Santiago se dé cuenta de una vez por todas de lo compleja y peligrosa que está la situación en la zona. Durante las últimas semanas no ha cesado la violencia dando cuenta del nivel de agresividad que presentan los organizaciones terroristas que están detrás de estos hechos, por lo que se hace imprescindible que el Gobierno de una vez por todas de una señal verdadera y potente de que está de parte de las víctimas y no de los victimarios en estos hechos
Sabemos que este estado de Excepción “acotado” es una medida insuficiente ante un problema tan complejo, pero al menos es un avance ya que permite a las Fuerzas Armadas vigilar los caminos, por lo que espero que de una vez por todas, se acabe este desprecio por nuestra seguridad de parte de las autoridades y que se tomen medidas reales para combatir la delincuencia y el terrorismo en nuestra zona antes de que tengamos que lamentar hechos de mayor gravedad como los que han sucedido en otras zonas del país.
Decretar un Estado de Excepción en toda la macro zona, no es un capricho político, ni tampoco es un atentado a los derechos humanos. Es una necesidad imperiosa para dar seguridad a las personas y proteger los derechos humanos de la gente inocente, en lugar de estar siempre con mano temblorosa resguardando los derechos de criminales, que a lo único que nos ha llevado, es a tener que soportar una total impunidad