BERNARDO BERGER

Intervención en el proyecto de ley, en segundo trámite constitucional, que modifica el Fondo de Garantía para Pequeños y Medianos Empresarios (FOGAPE), con el objeto de potenciar la reactivación y recuperación de la economía.

BOLETÍN Nº 13.970-05

Presidente, valoro sobremanera los esfuerzos que se han hecho con esta herramienta de apoyo a los pequeños y medianos empresarios, que sin lugar a dudas ha favorecido a más de 270 mil créditos garantizados por el FOGAPE por un monto superior a los 316 millones de unidades de fomento.

Sabemos también que casi el 70% de estos créditos han sido otorgados a más de 3 años plazo y aproximadamente el 30% al máximo plazo reglamentario de 48 meses, y que hasta hace muy poco el FOGAPE había utilizado cerca de un tercio de su capital autorizado, por lo que aún tiene capacidad suficiente para seguir entregando garantías, las cuales hoy, con este Proyecto podemos perfeccionar.

Si bien se aplaude la iniciativa, debemos ser realistas en reconocer que la implementación de la medida no estuvo a la altura de las expectativas que generó en las pymes.

Se detectó un tiempo promedio de 3 semanas entre la solicitud del crédito y el curse del mismo, con montos de préstamo que en promedio no superaban el mes de ventas normal de una pyme.

Es decir, que, a pesar de haberse cursado un crédito, el monto prestado rara vez cubriría el tiempo de espera que tuvo el emprendedor o emprendedora en la solicitud de su crédito.

Factor relevante en esto fue que FOGAPE entregó a los bancos discrecionalidad absoluta respecto de la evaluación de riesgo, lo que generó el efecto obvio de que los mejores créditos o las mejores condiciones, llegaron a las empresas que habían sido menos afectadas por la pandemia, dejando fuera a las más afectadas, por lo que espero que con este FOGAPE II Reactiva, se cambie este factor que es muy importante.

Me parece que FOGAPE II Reactiva, representa un cambio positivo al poder ser implementado por más tiempo en general, ya que las pymes están lejos de haber sorteado esta crisis y no están en condiciones de comenzar a pagar la deuda adicional del FOGAPE, sobretodo porque no hemos llegado a una etapa de reactivación económica y son aún muy pocas aquellas que han logrado adaptarse a todos los cambios.

En fin Presidente, lo más relevante en este Proyecto, es que la tasa sea lo más baja posible, y que los mecanismos de evaluación de riesgos se adecuen a la realidad que vivimos hoy en día.

Por otro lado, lo ideal sería que aquella porción del crédito que esté garantizada por el FOGAPE, ésta debería ser una tasa 0 en virtud considerando que se trata de una media de ayuda pública en razón de la crisis sanitaria. En eso, debemos tener mucho cuidado, no vaya a ser que esta ayuda termine siendo un salvavidas de plomo para las pymes más desesperadas.

He dicho Presidente

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