El Covid-19 ha dificultado el bolsillo familiar. Le ha complicado la vida a millones de compatriotas y extranjeros residentes para poder mantener los medios de subsistencia mientras dure la pandemia.
Pero la crisis sanitaria ha generado también una oportunidad de crecimiento y reconversión en áreas específicas. Viendo esto propuse la semana pasada un proyecto de ley, ingresado a trámite al Congreso Nacional, para crear una serie de medidas que incorporen más resueltamente a los emprendedores chilenos a las oportunidades de E-Commerce y E-Working.
Y es que es innegable: Chile se encuentra en un proceso de desaceleración producto del estallido social de octubre de 2019. Agregado a eso, el impacto mundial del Covid-19 hace suponer que el país podría entrar en un periodo de recesión económica semejante o más agudo que la Crisis Subprime de 2008. De acuerdo a la Cámara Nacional de Comercio, el 87% de las empresas no será capaz de resistir más de tres meses sin ventas.
Por otra parte, las ventas online han aumentado en un 119% en solo un mes, a diferencia de las ventas presenciales que han caído en un 41% en el mismo lapso como consecuencia de las medidas de aislamiento social.
En ese escenario y en medio de la pandemia, hay una enorme oportunidad y un primer paso para reconvertir la actividad económica hacia aquella que hace uso de las tecnologías de la información y la comunicación, como el trabajo a distancia y el comercio electrónico, pero se requiere un motor impulsor y una batería de incentivos y apoyos, y en estos momentos aquello sólo puede provenir desde el Estado.
La iniciativa que presenté solicita al Ejecutivo que, en virtud de sus facultades exclusivas, instruya al Ministerio del Trabajo para evaluar y elaborar una propuesta de capacitación integral enfocada directamente a preparar a los beneficiarios de sus programas Sence en los crecientes requerimientos de E-Commerce y E-Working del mercado nacional e internacional.
En el mismo documento, insto al Ministerio de Hacienda para revisar y proponer nuevas modernizaciones a la legislación tributaria que faciliten la inversión público-privada tendiente a una mayor incorporación del mercado a la economía digital; y al Ministerio de Transporte y Telecomunicaciones para generar una propuesta de incentivo al crecimiento de la infraestructura digital y la conectividad digital del país.
Bernardo Berger Fett
Diputado